10 pautas para atender a un alumno con TDAH

 

 

10 pautas para atender a un alumno con TDAH

En este artículo te presento 10 pautas para atender a un alumno con TDAH. Son pautas que todo profesor puede seguir. La presencia de alumnos con Trastorno por déficit de atención/hiperactividad (TDAH) en el contexto escolar es una realidad cada vez más extendida, por ello la importancia de dar una respuesta adecuada.
En este artículo te presento las cinco primeras pautas para atender a un alumno con TDAH. En una próxima entrada te presentaré los otros cinco consejos. A veces, la pedagogía tiene que hacerse muy práctica y pegada al terreno: esta es una de esas circunstancias.

Pautas para atender a un alumno con TDAH en clase

El alumnado con TDAH tiene sus peculiaridades y no voy a negar que en el contexto de un aula de 25 o de 30 alumnos crea problemas. Es complicado atenderlo, manejar su conducta y manejar sus dificultades principales.
En el caso del TDAH, los niños presentan dos síntomas diana: por un lado las dificultades para mantener la atención, centrarse en los detalles y abstraerse de todo lo que ocurre en el aula… que es mucho y más atrayente que las explicaciones o las tareas que están en la pizarra.
Por otro lado, su comportamiento hiperactivo e impulsivo: su dificultad de autocontrol, su exceso de energía que no se puede reprimir, en largas jornadas donde la conducta adecuada es permanecer sentado quieto y en silencio.
Pero a su vez, esos dos síntomas provocan un tercer síntoma definitivo: que sus dificultades le impiden o alteran significativamente la capacidad para funcionar adecuadamente o con la calidad esperada, en su rendimiento escolar o en su relación con los demás.
Pero a pesar de las características que estos niños presentan y de las dificultades para atenderlos adecuadamente en el aula, hay 10 pautas para atender a un alumno con TDAH, que todos los profesores de Educación Primaria y Secundaria pueden llevar a cabo. Ahí van las cinco primeras.

1º. Conocer qué es el TDAH y entender a tu alumno

La primera de las pautas para atender a un alumno con TDAH, es conocer el trastorno. Del TDAH se habla mucho de oídas y se conoce poco: hay muchos tópicos.
Los profesores, como profesionales que son, deben tener un conocimiento relativamente profundo sobre este trastorno tan extendido en la escuela.
Conocerlo no es difícil. Existen guías para profesores y docentes disponibles en la red. En este lugar te ofrezco alguna de estas guías que puedes descargar y leer.
Cuando se conoce el TDAH, se entiende por qué parte del comportamiento que presenta este alumnado no es “mala educación” o “falta de normas”, aunque en algunos casos eso también está añadido. Sino que se trata de un trastorno neurobiológico que explica gran parte de la forma de actuar de estos niños.

2º. Asígnale un alumno ayudante

Vamos con la segunda de las pautas para atender a un alumno con TDAH. Puedes asignarle un alumno ayudante y sentarlo junto a él… o al menos, cerca. La misión del alumno ayudante es recordarle algunas pautas habituales de clase, como anotar los deberes para el día siguiente, tocarle el hombro cuando no esté trabajando o no esté atendiendo para centrarlo; no molestarlo mientras se trabaja en clase y animarlo a trabajar. También le puede ayudar en alguna tarea que no sepa realizar.
Hay chicos que tienen ese don especial y que, animados por el tutor, pueden tener esta misión como un privilegio. El alumno ayudante puede también rotar por trimestres, para que otros pasen por esta experiencia.
Incluso el propio alumno que padece TDAH, puede en algún momento ser alumno ayudante de otro compañero.

3º. Segmentar las tareas

La tercera de las 10 pautas para atender a un alumno con TDAH, consiste en segmentarle las tareas que tiene que realizar. Es posible que un niño con estas características no sea capaz de afrontar 7 u 8 ejercicios seguidos. Pero si le pides que realice solo dos tareas del total, y que una vez realizadas se levante de la mesa y se acerque a enseñártelas, posiblemente sí pueda abordarlas.
Cuando las enseñe solo comprobarás que las ha realizado, no tanto si están bien o mal, salvo que sean errores muy evidentes. Cuando compruebes esas dos tareas, le animas a seguir con otras dos y que al terminarlas vuelva a enseñártelas.

4º. Cuaderno único

En Educación Primaria y por supuesto, en Educación Secundaria, se ha generalizado el uso de un cuaderno para cada asignatura. Sobre cuántos cuadernos utilizar, en Educación Primaria, escribí una entrada en su momento. Para los niños que padecen TDAH, disponer de varios cuadernos suele ser una situación complicada de manejar  y que provoca desorganización.
En estos casos la medida del cuaderno único es muy sencilla pero efectiva con el alumnado con TDAH. Consiste en reducir los cuadernos de todas las asignaturas a solo uno. En ese único cuaderno realizará todas las tareas. Tan solo tiene que indicar la fecha y el nombre de cada una de las asignaturas que realiza.
Más adelante, cuando tenga un dominio del cuaderno y adquiera otras habilidades de organización, se irán añadiendo cuadernos, pero de una manera progresiva.
Sobre el tipo de cuaderno a elegir, te animo a releer la entrada que escribí sobre esa cuestión.

5º Elegir la pauta y útil de escritura

La pauta sobre la que los niños escriben y el útil de escritura que utilizan, es otra variable que los profesores de niños con TDAH pueden gestionar para su bien.
La regla general podía ser elegir aquella que mejor resultado le da a cada niño. Por tanto, no puede generalizarse a toda la clase un único formato de pauta: todos escriben en hojas de doble pauta, de cuadritos, Montessori… Lo ideal es que cada niño escriba en aquella en la que mejor “se defiende”. Pero en el caso de los chicos con TDAH es una medida casi obligada.
En general, las hojas cuadriculadas no les ayudan: para muchos de ellos suponen un motivo de confusión y desorganización. La doble pauta les puede resultar asfixiante… parece que, en términos generales, las hoja de una línea son las más adecuadas.
Lo mismo ocurre con el útil de escritura: escribir con lapicero tiene la ventaja de que se puede borrar, pero en ocasiones, es una herramienta que enlentece la escritura y requiere más esfuerzo. En algunos niños los bolígrafos de tinta de gel, les ayudan por tener una escritura más fluida. Si se equivocan, pueden colocar entre paréntesis los errores. En otros casos, hasta las plumas estilográficas escolares, les ayudan a mejorar la letra y la escritura.
También en este aspecto, aconsejo algunas recomendaciones que escribí para mejorar la letra: también son válidas para que la consideremos entre las pautas para atender a un alumno con TDAH.

Recopilando

Te estoy ofreciendo 10 pautas para atender a un alumno con TDAH en la clase. En esta primera entrada te he presentado las cinco primeras:
  1. Conocer qué es el TDAH y entender a tu alumno
  2. Asignarle un alumno ayudante
  3. Segmentar las tareas
  4. El cuaderno único
  5. Elegir la pauta y útil de escritura
Espero que te resulten útiles. Accede al siguiente enlace para leer la segunda parte de la entrada:
 
 

Comentarios